domingo, 22 de febrero de 2015

CRÓNICA LGP (21-02-2015) CAL QUICO, PRATS DE LLUÇANÈS.

LGP siguen presentando “Sancta sanctorum”.
Ya ha pasado cerca de un año de la edición de este, y siguen acudiendo allí donde sea necesario para defender el segundo plástico de estos tres veteranos de la escena rockera catalana.
En este caso, el concierto, en la Cataluña interior, en concreto en Cal Quico de Prats de Lluçanès. Aparatado de la masificación de las grandes ciudades, y en un ambiente entrañable.
La banda no ha cambiado el planteamiento que llevan. No hay teloneros, su set se basa en este segundo disco y en unas versiones muy LGP de los seminales Sangtraït.
Y es que por poner un ejemplo, con “La maledició” Quim se mostró asombrado que no supiésemos que tema entonaba. Sin duda, el querer adaptar y darles un nuevo aire a los temas de los Sangtraït, hace que los temas suenen un tanto cambiados. Por otra parte siguen sonando tan excelentes como siempre han sido. Pero con una perspectiva un tanto diferente.
Es de agradecer ver a un Quim muy comunicativo y muy de buen humor, cosa habitual en él por otra parte. A un Joan disfrutando de su labor a las guitarras y animando al público, y la locomotora de la banda siempre funcionando a tope del Martín.
En cuanto al set, desde la magnífica “Dibuixos a la boira” seguido por un solo de bateria, a la mascota del grupo “Rockferatu”. Pasando por “Trampes de cotó”, “La collita”, “El bosc del silenci”, “La mirada de Medusa”, “Besiers, 1209” recordando los cataros, “Traïdors”, “Sancta sanctorum”, “Presonars del errors” o ese gran tema dedicado a los que viven el Rock de manera llena: “Als herois del Rock”. Como veis casi todo el último disco!
Y claro, parte importante que dejan casi para el final y final, son las versiones de Sangtraït.  Un legado tan beneficioso como lapidario. Supongo me entendéis…
Con la antes citada “Als herois” empalman con “Alè de mil-cent” recordando aquel vídeo en que la banda iba sobre dos ruedas. Y me refiero a motocicletas también.. “Les creus vermelles” es otra imprescindible, al igual que un “Inqui-missió” que con ellos suena más pausada pero más marcada.
Y final de fiesta con una canción fenomenal para el día ventoso que hacía con “Els senyors de les pedres” y por último un canto a la libertad que ya acompaña a diferentes generaciones, y que sigue siendo una de las joyas del Rock hecho en Cataluña: “El vol del home ocell”, cantada por toda la sala en un estallido de júbilo.
Otro buen concierto de estos tres grandes músicos y van….
Por cierto, para cuando una versión de Terratremol o Rockson!




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