jueves, 22 de diciembre de 2016

CRÓNICA ATLAS (17-12-2016) SALA MONASTERIO, BARCELONA

Han pasado siete años desde que ATLAS vinieron por primera - y hasta ahora única vez - a tierras catalanas. En concreto a Barcelona. La banda está presentando su último trabajo “Nuevos tiempos, viejas costumbres”. Para quien no los conozca  (una crónica de un concierto también es una buena manera de acercarte a un grupo que no conoces y quién sabe si harás por conocer) son una banda de cuatro curtidos músicos madrileños. Ángel Arias, V.M. Arias, Ignacio Prieto o José Martos han estado en grupos tan destacados como NIAGARA, BARON ROJO, EDEN LOST, MURO, ÑU, PANZER,… Una banda que tiene el Hard Rock por bandera. En algunos momentos sonando más clásicos, en otros más melódicos. Amalgamando muchas de las virtudes que han ido atesorando. Un Hard Rock con letras actuales, y gritando a pleno pulmón “No” a este mundo que nos toca vivir. Evidentemente a todas esas causas que nos hacen peores como personas.
Dicho todo esto, la banda comenzó con Cosa de valientes de su nuevo álbum, para seguidamente ir a su primer álbum con Unidos, y un ritmo que bien podría haber entrado en los Muro de “Corazón de metal”. Etapa en la que estaba Manolo Arias. De este disco seguiría Condenado loco con ese ritmo entrecortado y cierto sabor a los Baron. Volverían al último plástico con la potente Vete al infierno, un tema en que vemos la maestría y pegada de J. Martos ya recuperado de su lesión de espalda. Oveja negra fue la primera en salir a escena de “Contra viento y marea”, y una letra que es el cuento eterno de padres a hijos: deja de soñar ya chaval, que el Rock no te llevará a ningún sitio!
En cambio para la siguiente Un sueño cumplido, podemos ver eso de quien la sigue la consigue. Un tema en que los coros son parte importante, y que son llevados al escenario de manera más que solvente por la banda. Y eso que como bien demostró con un muy buen sentido del humor, Ángel estaba afónico. En Demasiado bueno para durar llegaron los momentos más relajados del concierto. Electrizante Da igual, y a por otro de los grandes temas de la banda (y eso que tienen unos cuantos!) Generación sin miedo a vivir. Esta tal como dijo Ignacio es el primer tema que compuso la banda. Una banda que en todo momento estuvo muy participativa con los allí presentes. Parte de ti, parte de mi podría ser una canción hecha por unos Free del 2010, y en Nosotros somos la revolución con un estribillo matador nos dicen eso de que hay que hacer algo para mejorar estos tiempos que nos toca vivir y que a las nuevas generaciones les tocara sufrir..
Vuelta a lo más reciente con Esperaré y Gritaremos no. Todo ello sin perder en intensidad ni fuerza. Imperio de la ley es uno de esos temas para quitarse el sombrero. Melodía y fuerza son compañeras de viaje. Y antes de hacer un merecido descanso, la coreable Somos una misma voz.
Unos segundo para coger aire, y vuelta al escenario con 2040 (El mundo que hemos conocido), un ejercicio de imaginación que hacía la banda en su primer álbum sobre cómo sería el mundo en esa fecha. Nada alentador lo que escribían!
Y para irse un Contra viento y marea que es toda una declaración de principios por parte de la banda. Sin duda dos grandísimos temas para cerrar un concierto que me atrevo a decir que calificaríamos de “10” todos los allí presentes.
Por cierto, si estás leyendo esto es que a pesar de lo largo del texto, has encontrado interesante llegar hasta aquí. Y te lo agradecemos. Porque poner palabras a emociones es muy complicado. Y emociones fueron unas cuantas las vividas en la sala monasterio el pasado 17 de diciembre! 












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